El desarrollo de las básculas industriales en Sevilla no existiría sin una serie de conocimientos acumulados. Desde que pudimos vivir en poblados, medir las distancias y pesar los materiales fue cada vez más necesario. Los romanos tuvieron sus propias medidas, que lograron persistir durante algunos siglos. Si te interesa esta gran civilización, no dejes de leer.

La cultura romana usaba distintos pesos y medidas. Estas estaban basadas en las partes del cuerpo y se dividían en doce unidades. Se cree que esto tiene su origen en Mesopotamia, al usar sus habitantes las falanges de los dedos para contar.

Puede que incluso aún queden básculas industriales en Sevilla tan antiguas que tengan algo que ver con estas formas de medición.

A la hora de pesar, estos afamados ingenieros usaban la libra, que equivale a 327 gramos, y se subdividía en doce partes llamadas onzas que, a su vez, estaban divididas en 24 escrúpulos con una equivalencia de 1,5 gramos. Este sistema de pesos aún era usado en el siglo XVIII por muchos países, pero cambiando los valores.

Los romanos usaban dos tipos de báscula: la libra y la statera. La primera se diferencia de la segunda en que tiene los brazos iguales. Además, a la statera se le llama balanza romana.

Contaban con pesos de distintos materiales para realizar las medidas. No era raro ver varios metales, el mármol o piedras corrientes. Sin embargo, preferían medir los pesos a través de la capacidad de sus recipientes.

Para acabar, quizás te sorprenda saber que en todas las ciudades se disponía una mensa ponderaria donde el ciudadano podía consultar los patrones de los pesos y medidas usadas en el imperio.

Como ves, hemos heredado de los romanos tantas cosas que darían para infinitas entradas. Desde S.I.P.A.C te invitamos a contactarnos. Somos especialistas en fabricación de equipos de pesaje industrial y su comercialización.